lunes, 18 de noviembre de 2024

 Difícil, difícil ser madre sin duda, más aún, madre de una mujer, que sientes que te juzga cada día de su adultez, como si fuera el último... no quisiera perder esa oportunidad que podría marcar un quiebre, y hacer que todo cambie y borre de un plumazo los errores cometidos, no olvides nunca que además de ser tu madre, fui una niñita solitaria, tímida, que creía estar de más en todas partes y creció con muchos miedos que nunca superó, aún no me gustan los dormitorios oscuros, aún me da miedo otro cuerpo al lado mío, el viento, la velocidad de los autos, todo eso me da miedo, estar sola no me asusta, estar sola me da calma, me siento libre y feliz, como en un nuevo comienzo, el ruido me vuelve loca, despertar me angustia, despertar en medio de la noche me aterroriza, una conversación de muchas voces me abruma, a veces no encajo en ninguno de los lugares en que deambulo cual extraterrestre, o extranjera que no conoce los códigos ni el idioma, cuando eras una vida pequeñita, quería solo abrazarte y quererte, que nada malo te sucediera, que nadie osara decirte una fea palabra, no quería que me arrebataran mi tesorito, tus manitas, tu carita, despertaba con tu carita pegajosa aplastando la mía, amaba cada movimiento,  mirada tuya, cada indicio de vida, tu respiración tranquila cuando dormías, agitada cuando corrías, tu risa maravillosa y llenita de vida, tu pelito transpirado y tu piel pegajosa, tu parada decidida ante la vida, a tu año y medio, ya sabías pararte como mujer decidida y fuerte ante otros, sabías decir no a lo que no te gustaba y a esa edad era divertido, hoy, me encanta, me encanta y admiro la fuerza que anida en tu ser.

Te pido que no me juzgues con tanto rigor, soy una humana, una mujer que creció en un país lleno de obstáculos y dolor, un país quebrado, injusto triste y con muchos escollos. Es q lees mucho, me decían, la música que escuchas, la ropa que usas, que linda Lili, con esa carita de pena, parece que tuvieras un dolor de amor en tu corazón, una pena de amor, y yo tenía 15 años!!! quién puede pensar que una pena o un dolor sea un rasgo que embellece.

Tuve una adolescencia difícil, me gusta acordarme de la complicidad con mis hermanos viendo películas o series, la música el cine y los libros que leíamos y comentábamos, sin embargo siempre estuve aparte, haciendo esfuerzos para sentirme "incluida", "aceptada" me puse a pololear muy chica, esas tardes solitarias de invierno, oscuro, con la casa pasada a parafina, adormecida por la soledad y el frío que me invadía por dentro y por fuera, hicieron que buscara cariño y protección en el pololeo, experiencia que me obligaba a crecer antes de tiempo, el despertar de las hormonas y la soledad sensiblera no hicieron bien su trabajo. Me expuse, a vivir experiencias duras, que minaban aun más mis inseguridades.

En fin, esa mezcla de relaciones y épocas, hicieron de mi una parte de lo que conoces como madre, trabajando hasta tarde por las razones que ya de sobra habrás escuchado en conversaciones familiares, llegando a la casa con tu padre prisionero de sus miedos e inseguridades, esperándome ebrio, desconfiando de mi, de lo que yo pudiese estar haciendo a sus espaldas, acosándome con llamadas llenas de dudas y reproches, me refugiaba en mi amor hacia ti y tu hermano, tus abrazos y amor inocentes eran el calorcito que me daba fuerzas para no desfallecer, para levantarme cada día y seguir luchando, día tras día, la misma rutina, cuánto, cuánto más debo soportar sin decaer me preguntaba, a veces me subía a la micro y fantaseaba con seguir, seguir y no bajar en ningún lugar, no tenía adonde refugiarme. Muchas veces sentí tal soledad que quedaba en blanco, con nadie podía conversar estas cosas, vivir en comunidad es muy bueno, pero no da lugar a la libertad ni a la independencia emocional, los límites físicos son más fáciles de poner.

Hoy ya eres una mujer, inteligente, amorosa, te alineaste con tu padre, lo apoyas en forma incondicional, sin darte cuenta tal vez de las heridas que yo llevo, a veces soy brusca, a veces soy una hojita delicada, me cuesta poner límites, me cuesta pedir cariño, aun cuando lo que más me gusta en la vida es disfrutar, reír, cantar , bailar, saltar, que me abracen, cosas que no son bien vistas en nuestro núcleo, a veces no me di cuenta como subieron los grados alcohólicos a mi cerebro, entre risa y risa o entre dolor y penas, quizás te habrás dado cuenta que hoy en día controlo, voy despacio. Cómo quisiera poder conversar estas cosas entre todos, es difícil, se requiere mucha fuerza y sabido es que seria como tirar una bomba, por ahora me conformo con esperar que me leas, llegar a tu corazón y entiendas algunos por qué y sueltes un poquito el papel de gendarme o inspectora con mi persona, yo sigo amando a mi hija niña, joven, mujer, esperando seas feliz y sin esos sentimientos culposos con los que crecí.

lunes, 11 de noviembre de 2024

 -Veamos una película de Nicholas Cage, 

- WTF?? 

- Es lo que NECESITO, Necesito saber que el mundo no se cae pedazos, que mi paisaje no se desploma, que las cosas y las personas permanecen a mi lado, no aguanto, no quiero cambios aun q sí los quiero, y así tiene que ser, pero NECESITO que alguien sostenga esos cambios, yo no me la puedo, no me puedo esta carga, no doy más, no puedo más.

- (...)

- Hubo años en que todo alrededor era oscuro y doloroso y parecíamos suspendidos en un bucle, en un reloj sin cuerda, no veíamos futuro, tampoco teníamos las herramientas ni la fuerza, ahora las fuerzas están gastadas, por eso necesito ver a Cage, sudado, agotado, con sus ojos desorbitados, corriendo, y superando dificultades, cayendo por el barranco y apareciendo más tarde, con el pelo mojado y su mechón eterno sobre la frente, tomando una cerveza mirando con sus ojos inocentes un futuro brillante y luminoso...