jueves, 31 de marzo de 2022

Ivan padre quería que su hijo fuera médico, su esposa quería que fuera feliz, nadie le preguntó al retoño qué le gustaba en la vida, a un niño no se le pregunta eso, no se le preguntaba, un niño no tenía preferencias, sólo debía hacer lo que se le exigía. Ivancito jugaba con lo que podía, nunca le compraron el trencito a cuerda que le gustaba, era muy caro para un funcionario de correos de Chile de provincia; había cuentas que pagar y ahorros que cuidar para cuando Ivancito fuera a la universidad a estudiar medicina, Ivancito no sería otra cosa que un gran médico decían sus papás cuando la familia se reunía, los hijos crecían y llegaba el momento de decidir el futuro. Ivancito creció, estudió y fue todo lo que sus padres soñaron para él. Cada mañana, cuando llega a su centro médico, vuelve a ser Ivancito, agarra el ecotomógrafo y se convierte en el operador de retroexcavadora que siempre soñó en convertirse, y juega , juega que abre forados en cavernas y excava, excava, se mete por intersticios, revolviendo escombros y haciéndolos a un lado para ver que hay entre esas fisuras, Ivancito ahora es un hombre grande, un adulto mayor, y sigue jugando, juega, imagina que es un gigante operando una retro excavadora minúscula que revuelve escombros, en un planeta desconocido, ajeno a la mujer que tendida en una camilla apreta sus manos aguantando el dolor y las ganas de gritarle que sea más suave por favor!!!

miércoles, 23 de marzo de 2022

Ay Zappa, como me sacudes y revuelves mientras te/me paseas con tus notas tortura de aquellas/ que malamente aprendí a disfrutar "watermelon in easter hay" / piel que flota y vuela, no sin antes dar un tumbo tras otro en las rocas porosas que te despellejan. Demasiado sinsentido.

jueves, 3 de marzo de 2022

Escape, en la música, en los libros, en los sueños, en la gente que pasa por mis ojos.Escape. En las letras, en los colores.De qué escapar? de las certezas, de aquellas q me acompañan desde que nací, desde que supe que la vida es un juego maligno del cual salimos todos perdedores. Nadie le gana a la vida, nadie la puede hacer lesa, Nadie te hace lesa vida, nadie puede engañarte, una mujer borracha llora escuchando unas voces de niños que cantan, voces blancas le llaman, voces puras, la mujer eufórica, a ratos baila, danza, da vueltas miuentras escucha la música, el cerro gigante, las nubes rojizas, el cielo abierto, tanta vida mentirosa. Anochece y la mujer sigue su baile esperando que la música siga envolviéndola abrigando a su espíritu y a la niña que fue.